Desde la infancia nos inculcan una serie de rutinas para cuidar de manera correcta la salud e higiene de nuestros dientes, como cepillarnos los dientes tres veces al día, visitar periódicamente a nuestro dentista, etc. Sin embargo, más allá de estas saludables costumbres, existen también algunos malos hábitos que hacemos de forma cotidiana y que son perjudiciales para nuestros dientes.

Estos son algunos hábitos que hacemos a diario y que dañan nuestros dientes

  • Morder objetos duros. Pueden llegar a provocar pequeñas fisuras o fracturas, así como fomentar al desgaste de nuestros dientes, incluso pueden llegar a dañar seriamente la sensibilidad dental.
  • Usar los dientes como herramientas. Evitemos dañar nuestros dientes de forma accidental recurriendo a las herramientas adecuadas.
  • Abusar de las Bebidas Carbonatadas con azúcar. Este tipo de refrescos y bebidas suelen contener una alta dosis de azúcar, y especialmente de ácidos (cítrico, fosfórico, tartárico y/o carbónico), que a la larga pueden llegar a erosionan la capa protectora de los dientes.
  • No cambiar el cepillo de dientes con frecuencia. El motivo principal es que, después de este tiempo, su efectividad para eliminar la placa y los restos de alimentos de los dientes y encías es menor.
  • Utilizar una pasta dental inadecuada. A la hora de elegir nuestra pasta de dientes, es recomendable elegir aquellas que lleven flúor, un componente esencial para mantener a raya a todas aquellas bacterias que el cepillo de dientes no puede eliminar.